jueves, 29 de junio de 2017

EL BOLSILLO DE LELA




Mi amiga Cris ha sido abuela. No hay nadie más guapo que Ezbis, nadie tiene los ojos más hermosos que los de Ezbis... Y listo? Os podeis imaginar que en sus balbuceos Cris ya adivina palabras en inglés, francés y hasta en ruso? Pero esto de ser abuela, reconozcámoslo tiene una parte muy buena: el corazón nos palpita más fuerte, se nos derrite el cerebro y aflora la parte más tierna y creativa.  Cris  ha escrito un cuento para Ezbis.

EL NIÑO QUE DESCUBRIO EL BOLSILLO DE SU ABUELA LELA

Cuando Ezbis nació era pequeñito, como todos los bebés.

A sus papás les pareció el niño más bonito del mundo, como a todos los papás.

Los tres estaban encantados de haberse conocido.

Cada día llegaban a verle diferentes personas que le sonreían, hablaban  o le cantaban.

En medio de todas ellas apareció una que, cuando le tomó la mano casi se derrite como un bombón de sol de verano.

Le dijo susurrando muy bajito:


"te voy a guardar en mi bolsillo"


Y Ezbis descubrió a la dueña del bolsillo, una de sus abuelas.

Vaya si la descubrió!

Era una señora que cantaba muy mal, pero a él le gustaba

Que le mecía regular, pero a él le tranquilizaba. 

 "Tengo un bolsillo invisible de tamaño infinito con forma de corazón. Corazón de melón!

Cantaba ella






Poco a poco el niño se asomó a la abertura del bolsillo, era un lugar donde la magia habitaba...






Tatachán!



Miles de papeles de colores, bien doblados, llenaban el hueco.

Al desplegarlos se descubrían garabatos

Solo ella, la señora que cantaba malamente, de momento, los podía interpretar...



La isla del tesoro

Capitanes intrépidos

Las aventuras de Tom Sawyer



El libro de la selva

Pinocho
Los viajes de Gulliver
El príncipe feliz



El hobbit  y el señor de los  anillos


Ezbis era bebé y, claro, no sabía leer.

En los primeros meses de su vida le encantaban esos colorines que se desplegaban ante sus "ventanitas" abiertas de par en par al mundo

Ojos preciosos
E   Z   B   I   S


Y el protagonista de este cuento, decidió que cuando fuese muy, muy mayor, dentro de tres o cuatro años, tendría que aprender bien a leer




Mamá
Niña...

Mesa

mapa


 Mano




Los papelitos de Lela y sus colores.

Los había_

Rojos como las cerezas y algunas de las flores de los balcones de la casa de Ezbis (a su mamá le gustan mucho)

Verdes como el campo en primavera, como las peras, las manzanas...

Amarillos que imitan al sol, a los plátanos, a ls espigas de trigo cuando lega el verano


Blanco como la nieve. Un día de invierno lo descubrió en el jardín desde los brazos de su  papá

Azules, parecidos al cielo y a los mares
Violetas, ya sabeis, ese color que tiene el arco iris que no es azul ni rosa




Rosas, pues rosa como las flores

Ja, ja!


Naranjas, como las calabazas, las flores que tiene su vecina Tina y esa fruta que tiene mucho zumo....


Oh, oh, la naranja, claro!



Marrones, color de las castañas, que en otoño cubren el suelo del bosque que rodea la casa donde vive Ezbis con su familia

Y su perro "Niní"


Los garabatos son las letras que forman títulos de algunos libros de aventuras

Descubierto el misterio,
todas las palabras en cualquier idioma se dibujan. Juntas forman frases y con ellas nos comunicamos de manera escrita.

A Lela la gusta leer

Gracias a ello vive vidas que jamás podría vivir, descubre lugares a los que nunca podrá ir y sobre todo es consciente de todo lo que le falta por aprender

EZBIS:

Algunos de estos papelitos, que te deslumbran por sus coloridos y están sin letras, los guardo para que tu los rellenes con toda cuanta aventura que quieras recordar, inventar o soñar

                TU LELA

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