ARTEMISIA GENTILESCHI 1593-1654
Cuando vi este cuadro de ARTEMISIA GENTILESCHI "Judit decapitando a Holofernes" me dió la sensación de que no era una mera representación artística
Imaginés que era la propia Artemisia la que estaba torturando a ese hombre. No es Judit la ejecutora, es Artemisia. En su obra se refleja odio y placer por la venganza.
Eso tiene que ver con algo personal, pensé...
En 1612 el pintor Orazio Gentileschi presentó una demanda contra el que hasta ese momento había sido colaborador y amigo, Agostino Tassi, por violar a su hija Artemisia y robar un cuadro de Judit de grandes dimensioes.
Según testimonios de la época, Artemisia declaró:
“Cerró
la habitación con llave y una vez cerrada me lanzó sobre un lado de la
cama dándome con una mano en el pecho, me metió una rodilla entre los
muslos para que no pudiera cerrarlos, y alzándome las ropas, que le
costó mucho hacerlo, me metió una mano con un pañuelo en la garganta y
boca para que no pudiera gritar y habiendo hecho esto metió las dos
rodillas entre mis piernas y apuntando con su miembro a mi naturaleza
comenzó a empujar y lo metió dentro. Y le arañé la cara y le tiré de los
pelos y antes de que pusiera dentro de mí el miembro, se lo agarré y le
arranqué un trozo de carne”.
(Eva Menzio (editora), Artemisia Gentileschi, Lettere precedute da Atti di un processo di stupro, Milán, 2004)
Tassi fue condenado pero no llegó a cumplir condena, gracias a la intervención a su favor del Gran Duque de Toscana. Artemisia fue humillada y los amigos de Tassi hicieron todo lo posible para que fuera considerada una ramera.
Artemisia se casó un mes despues del juicio, un matrimonio arreglado por su padre, con el pintor Florentino Pietro. Esto sirvió para devolver a Artemisia un estatus de honorabilidad
Dicen
las Escrituras que Judit era una mujer viuda que vivía en Betulia
cuando la ciudad fue asediada por los asirios. Judit, con la ayuda de
una criada, planeó el asesinato del general asirio Holofernes. Se puso
sus mejores vestidos y joyas y se dirigió al campamento del general
portando viandas y vino. Holofernes se entusiasmó con la mujer, comió
y bebió, y cuando cayó en su lecho, totalmente borracho, Judit lo
decapitó con una espada. La criada colocó la cabeza de Holofernes en las
alforjas para llevarla a la ciudad, donde Judit la mostró a los hebreos
colocada sobre una bandeja
Judit y Holofernes (Caravaggio)
Goya
Cranach
Hay
numerosas versiones de Judith y Holofernes en la historia del arte
pero en la de Artemisia no hay concesiones religiosas, solo vemos a dos
mujeres atacando con todas su fuerzas a un hombre borracho. Algunos
historiadores del arte aseguran que es un error ver una venganza de
Artemisia contra Tassi, basandose en que la pintora, artista profesional
protegida por el Gran Ducado, tenía que pintar lo que le pidiesen sus
mecenas...yo solo dejo aqui obras de Artemisia y cada uno que juzgue.
Y sigo aqui la historia con un artículo de EL PAIS CULTURA
Artemisia
se casa con el florentino Pierantonio Stiattesi, hijo de un zapatero, y
se marcha a Florencia. En la corte del gran duque de Toscana, Cosme de
Médicis, vivía Galileo Galilei: bajo su influjo y amistad, la pintora se
inscribe en la legendaria Academia del Dibujo. Tiene 23 años, y es la
primera mujer de la historia que entra en ese Olimpo. En 1617, Artemisia
es madre de tres hijos, pinta asiduamente para los Médicis y tiene un
amante noble e intelectual, Francesco Maria Maringhi. Pero el marido se
endeuda hasta las cejas y la pareja huye a Prato.
Jael and Sisera
Desde allí, vuelta a Roma, donde Artemisia vivie entre 1620 y 1826, en una casa cercana a la plaza del Popolo, que un visitante describe como "digna de un gentilhombre". Dos de sus tres hijos han muerto y en 1622 el marido es acusado de haber herido en la cara a un español que cantaba una serenata bajo el balcón de la artista. Pronto se separaron. Ella viaja a Venecia y vivirá tres años de éxito, antes de marcharse a Nápoles para ponerse al servicio de otro admirador de la pintura, el virrey español Fernando Enriquez, duque de Alcalá
Susana y los viejos
En
el centro de Nápoles abre un taller en el que trabajan una docena de
ayudantes y aprendices. Se hace amiga de Onofrio Palumbo, gran artista
partenopeo, y durante 20 años forma a los mejores pintores del futuro,
Cavallino, Spardaro, Guarino... Su fama cruzó fronteras, y el rey Carlos
I de Inglaterra ordenó contratarla. Pasó dos años en Londres, donde su
padre era considerado el mayor maestro de su tiempo, hasta su muerte en
1639. Las crónicas dicen que el funeral de Orazio en Londres estuvo a la
altura de los de Rafael y Miguel Ángel.
Pietá
Mientras
sus coetáneos pintaban iglesias y capillas, Artemisia trabajó sobre
todo para coleccionistas privados: el duque de Módena, los Médicis, los
D’Este y el conde de Amberes, banqueros, nobles y príncipes europeos.
Sus numerosas cartas y facturas atestiguan que fue una de las firmas más
cotizadas de su tiempo. Los aristócratas se rifaban sus cuadros, casi
todos de figuras femeninas, muchas veces desnudas y siempre llenas de
fuerza. Algunas son de un erotismo dulcísimo. Otras son intensas,
impetuosas y dramáticas. No hay una sola escena casera. Hay músicas,
pensadoras, y muchos homenajes a mujeres bravas: Cleopatra, Diana, la
Galatea, María Magdalena, Judith, Dalila, Betsabé…
En
1649 andaba terminando su maravilloso autorretrato: parece una mujer de
ahora mismo, con los labios pintados y el pelo corto. Según su biógrafa
Alexandra Lapierre, “Artemisia rompió todas las leyes sociales y solo
perteneció a su tiempo. A la conquista de su gloria y su libertad, con
su talento y su fuerza creadora se convirtió en una de las pintoras más
celebres de su época y en una de las más grandes artistas de todos los
tiempos”.