Tomamos la carretera, ya, que esto es autopista pero pone PORTUGAL y en esto, en un soplo nos encontramos en el centro de Oporto. ¿No tendríamos que haber pagado un peaje? Nos preguntamos...Levanto la mano en señal de juramento, perdón no vimos nada...
Ya hemos vuelto. Bruno nos ha recibido envolviéndonos en fuertes lluvias y viento
El juez Joaquim Bosch comentaba que esto ocurre más con personas sin bienes, o con pocos...La soledad de la ciudad, donde no conoces ni al vecino puerta con puerta.
Y Juanjo se trasladó a Carabanchel para visitar a MONICA. Una mujer sola, viuda, para ver como se pasan las navidades en soledad. Monica es chilena. Cuando tenía 16 años comenzó a "conocerse por correspondencia" con el que sería su marido. El, 20 años mayor, regidor de teatro, entró a tomar un café en un bar y vio un listado de personas que pedían cartearse con gente de España en el periódico Arriba. Mónica encabezaba la lista. Se escribieron durante once años. El solicitó casarse por poderes pero la familia chilena no accedió. Al fin se casaron en Chile y el se convirtió en el que sería "un marido novio"- para toda la vida.
Mónica no se siente sola, dice que vive emocionalmente de las rentas. Pinta y visita el museo del Prado, un chico, un cuidador voluntario, la visita cada quince días. Ha llenado la nevera para las fiestas, hasta ha comprado cava y las uvas para brindar con sus recuerdos la llegada del nuevo año...
Mi hijo, el que vive en el Mediterráneo, me llamó- "Felicidades Mamá"- Felicidades desde Oporto contesté. ¿Qué? "Que estas fiestas son para pasarlas en casa en familia"- Ya, este año te respondo desde Oporto y para el próximo igual será desde Japón...
Ah, a propósito, Oporto es una ciudad preciosa y uno de los sitios de visita obligada es a Livraria Lello- No lo hagais. La veis por internet que es más interesante
Cogimos las entradas por internet. 25 euros, cuatro entradas con suplemento para no hacer cola. Llegamos antes de las diez pero nuestro registro de pago no aparecía "As cousas funcionan as veces, outras non"- dijo una chica de la taquilla. Al fin entramos, con otros cientos de personas, por las escaleras a empujones. Los japoneses, chinos, coreanos, además de otros, con las cámaras y sus palitos de selfies. Una de mis hijas salió como compañera de uno de ojos rasgados mientras la mujer gritaba. Arriba, alguien echó un pedo enorme, digo yo que seria enorme por el olor, aunque no pudimos descubrir al culpable porque el asunto fue muy silencioso. La empleada encargada abrió escotillas y yo dije "me largo, no aguanto este agobio"
Y para rematar caigo en la trampa... "Ya que estamos aqui podemos parar en IKEA en Braga"- Imaginemos tres animalillos salvajes correteando por la selva...Yo dije, aqui no compro nada... circular es la trampa...vueltas y vueltas, creo que vi las mismas cosas cien veces y cuando ves un letrero que dice "Atallo para as caixas"-quietoooo! Vuelta a empezar. Al final salgo con dos cestitas y un "no me acuerdo" porque todo ha quedado en el coche
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