Cranach el Viejo

Nació en Alta Franconia en  1472, hijo de un pintor mediocre y poco conocido.  La vida de este pintor engloba más de ochenta años de la historia política y cultural de este país germánico. Cuando murió en 1553, el país estaba empezando a encontrar y poco de paz despues de los terribles años de enfrentamiento en el campo de batalla de Müilhberg, que condujo a la derrota de los luteranos.

Desde las dramáticas crucifixiones de juventud hasta las hermosas venus; desde los retratos de los humanistas de Viena hasta los de  Lutero y de los príncipes alemanes  firman un buen ejemplo de la historia europea.

No se sabe mucho de su vida hasta que aparece en Viena, con 30 años de edad, ya como un artista consumado.  Su obra tiene influencias de Durero y de Grünewald, y en cierto modo, anticipa la posterior escuela del Danubio.

Como llegó a Viena no se sabe con seguridad, seguramente fue invitado por alguien  para dar clases en la universidad, hay quien asegura que la invitación le llegó a través de Durero.

Ya en Viena se casó con Bárbara  Brengbien, hija del burgomaestre de Gotha, pero en 1505 Cranach dejó la ciudad para siempre, llamado a Wittenberg por el elector de Sajonia, Federico el Sabio.  Fue un gran cambio para su vida, desde entonces se convirtió en pintor de corte.

En 1508 realizó un viaje por los Países Bajos con un encargo diplomático y aprovechó la estancia para conocer el país. Sus obras recibieron influencia de un italianismo aúlico inspirado  en los retablos de Quentin Metsys y en el clasicismo de Jan  Gossaert. Se enfrentó por primera vez al desnudo femenino para realizar un serie de Venus, Juicios de Paris y Gracias

Alrededor de 1515-1520 conoció a Lutero, que era profesor en Wittenberg y este hecho fue transcendental en su vida. Cranach se convirtió en retratista oficial del reformador y de su mujer. En esta  época Cranach consiguió hacerse rico. En 1522 compró una farmacia y más tarde una imprenta y una hosteria. Desde  1530 fue senador y desde 1537 hasta 1544 contramaestre. Del taller se ocupaban sus hijos, especialmente Hans y Lucas.

Despues de la catástrofe en la batalla de Mühlerg en la que su señor fue derrotado, Cranach  continuó siendole fiel y lo siguió en su exilio a Augusta y a Innsbruck. En 1553, ya muy anciano, falleció en Weimar