‘With dead head’: con 16 años, Damien Hirst se fotografió junto a la cabeza seccionada de un cadáver.
Damien Hirst, el que fue llamado "enfant terrible" de los llamados jovenes artistas británicos, es uno de los controvertidos y tambien uno de los más famosos artistas de su generación. Su amplia gama de creaciones incluye instalaciones, pintura, escultura y dibujo.
Damien Hirst nació en Bristol en 1965. Estudió en Goldsmiths
College en Londres y expuso por primera vez en 1988. Freeze, que así se llamó la exposición, se celebró en un almacén de los muelles de Londres, entonces un vecindario fuera de moda y lejano. Hirst se había acercado inicialmente a una serie de galerías comerciales, pero encontró poco interés en el proyecto. Michael
Craig-Martin, uno de los profesores de Hirst, persuadió a una serie de
personas influyentes en la escena del arte británico para asistir a la exposicion. Entre ellos se encontraban Norman Rosenthal
de la Academia Británica, Nicholas Serota, director de los museos y
galerías de Tate, y Charles Saatchi, entonces propietario de la mayor
firma publicitaria del mundo que dirigía su propia galería de Londres. Durante los 25 años siguientes, despues de la primera exposición, se convirtió en uno de los artistas más importantes de su generación. Muchas de sus obras son muy conocidas, como el tiburón sumergido en formol
o la calavera de diamantes
A través de su trabajo, Hirst adopta un enfoque directo y desafiante de las ideas sobre la existencia. Su
obra pone en tela de juicio nuestra conciencia y nuestras convicciones
acerca de los límites que separan el deseo y el miedo, la vida y la
muerte, la razón y la fe, el amor y el odio. Hirst
utiliza las herramientas y la iconografía de la ciencia y la religión,
creando esculturas y pinturas cuya belleza e intensidad ofrecen al
espectador una visión del arte que trasciende nuestra comprensión
familiar de esos temas.
La
polémica y el éxito continúan siendo inseparables para Hirst,
planteando interrogantes sobre la relación entre el arte y el dinero. Un hombre de negocios astuto, Hirst se ha transformado en una marca personal. Tiene algo que vender a casi cualquier persona. Para
los clientes que prefieren no vivir con un tiburón muerto, hay sus
"pinturas al azar", fáciles de ver en lienzos abstractos, basados en
las estructuras moleculares de los productos farmacéuticos controlados.
Las
reproducciones del famoso cráneo de diamantes incrustados están
disponibles para los consumidores en una variedad de precios y tamaños. También ha lanzado su propia línea de patinetes. En
su incesante y emprendedor enfoque comercial del arte, la carrera de
Hirst está estrechamente alineada con la de su compañero estrella de
arte Jeff Koons, quien lo ha citado como una influencia. Cindy Sherman, Sarah Lucas y Tracey Emin también han mencionado el impacto de Hirst en su trabajo. Fácilmente
uno de los artistas más famosos de su generación, el éxito de Hirst
- junto con el de los otros "jovenes artistas britanicos" - ayudó a crear las condiciones para
el establecimiento de Tate Modern en 2000, que se ha convertido en el
museo de arte moderno más visitado del mundo.
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