ZEUS, el más grande de los dioses del Partenón helénico. Dios de la luz, del cielo sereno y del rayo. Soberano de hombres y dioses.
Zeus no solo preside las manifestaciones celestes, sino que, sobre todo mantiene la paz y el orden en el mundo, Estas prerrogativas no solo las ejerce en lo que atañe al mundo de los hombres sino tambien en el de los dioses.
Hijo del titán Crono y de Rea. Crono había sido advertido por el horáculo que uno de sus hijos lo destronaría así que evitaba que esto se cumpliera devorando a sus hijos a medida que su esposa Rea los iba pariendo.
Cuando nació el sexto, Rea decidió salvarlo valiendose de la astucia. Lo parió de noche, en secreto, y por la mañana le presentó a Crono una piedra envuelta en pañales. Crono devoró la piedra creyendo que era un niño y así se salvó el pequeño Zeus.
Su nodriza fue la ninfa o cabra, Amaltea, que le dio su leche. Se cuenta que cuando murió la cabra, Zeus secó la piel y la usó como escudo protector en el combate contra los titanes.
Cuando Zeus llegó a la edad adulta decidió arrebatar el trono a su padre. Pidió consejo a Metis y esta le dio una droga para que Crono la bebiese y así vomitase a todos los hijos que había devorado. Cuando sus hermanos y hermanas volvieron a la vida ayudaron a Zeus . La lucha duró diez años pero al final Zeus y los suyos vencieron, arrojando a los titanes del cielo.
Para lograr esta victoria, Zeus había pedido consejo a Gea y esta le aconsejó que liberase a los cíclopes y hecatonquiros, que Crono había recluído en el Tántaro. Para lograrlo tuvo que matar a su guardiana, Campe. Agradecidos los cíclopes, dieron a Zeus el rayo y el trueno, que habían forjado. A Hades le regalaron un casco mágico que lo hacía invisible; a Poseidón un tridente, con cuyo choque podía mover la tierra y el mar.
Zeus repartió el gobierno del universo de la tierra con sus hermanos, pero el se quedó con la preminencia sobre el universo, es decir, el era la máxima autoridad.
No tardaron mucho los gigantes en rebelarse y quisieron disputar la victoria a Zeus y a los dioses Olímpicos.
Tifon, un ser intermedio entre un hombre y una fiera, hijo de Hera, engendrado por ella misma sin ayuda de ser masculino, tenía el cuerpo alado y sus ojos despedían llamas. Muy irritado porque Zeus había destruido a los Titanes, luchó contra el y lo dominó arrancándole los tendones, pero en un ardid de Hermes y Pan consiguieron recomponerle el cuerpo. Finalmente Zeus pudo acabar con Tifón en uno de los más duros combates que tuvo que trabar.
La primera esposa de Zeus fue Metis, hija del oceano. Gea predijo que si su esposa paría una hija, ella engendraría un hijo que destronaría a su padre, por ello, cuando llegó la hora del parto Zeus se tragó a Metis.
La segunda esposa de Zeus fue Temis, diosa de la justicia divina. Con ella tuvo varias hijas: Las Horas o las estaciones. Persenoficaban tres estaciones del año y estaban relacionadas con la fecundidad y la fertilidad. Eran tres: Irene, la paz; Diké, la justicia; y Eunomía, el orden. Entre otras funciones tenían que enganchar los caballos al carro del Sol, criar a Hera, acompañar a Afrodita, pasear en el séquito de Dionisio, Pan o Perséfone, pero sobre todo, tenían que custodiar la entrada del Olimpo y disipar las nubes
Zeus tambien se unió a Dione, y con ella engendró a Afrodita.
Con Eurínome tuvo las Gracias y de Mnenósine nacieron las musas
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